Dejémoslo claro desde el principio: Beth Gibbons tiene una de las voces más personales, emocionantes y camaleónicas de todos los tiempos. Ahí está la discografía de Portishead para encumbrarla como una cantante de interminable talento. Y aquí está Out Of Season (2002), el disco que publicó junto al ex-bajista de Talk Talk, Paul Webb (aka Rustin Man), para disipar las (im)posibles dudas.
Parece que Beth Gibbons aprovechó el largo parón de Portishead antes de Third (2008) para explotar algunas facetas y matices de su voz que no habíamos tenido el placer de escuchar con su banda. Su inolvidable interpretación en "Lonely Carousel", del fantástico Cinema (2004) de Rodrigo Leão, es una buena muestra de esto. Y todas las canciones de Out Of Season también.
Como su título indica, Out Of Season es un álbum completamente atemporal. De hecho es mucho más que eso: es un disco con alma de clásico instantáneo, sin artificios de ningún tipo. Su producción, heredera de tiempos pasados, está cuidada hasta al más mínimo detalle, tratando con mimo y respeto cada instrumento, cada nota, cada palabra.
"Mysteries", el primer corte del álbum, dibuja un ambiente otoñal, con pájaros silbando y hojas cayéndose de los árboles en forma de susurrantes coros y elegantes líneas de guitarra. Entonces Gibbons entona un estremecedor "God knows how I adore life" y no puedes (ni debes) hacer nada más que rendirte a ella. "Tom The Model" muestra una cara más animada, con arreglos orquestales de aquellos que ya no se encuentran y un estribillo lleno de fuerza. Una fuerza que contrasta radicalmente con la fragilidad y delicadeza de "Show", en la que la cantante vuelve a hacer gala de la capacidad de transformación de su voz. Acompañada por un constante piano y un contrabajo apenas audible, por momentos da la sensación que las cuerdas vocales de Gibbons se romperán.
"Romance" vuelve a confirmar la elevada calidad de las composiciones e interpretaciones de Out Of Time, mientras que "Sand River" vuelve a sumirnos en un estado de nostalgia a punto del dolor. "Spider Monkey" parece un avance de la claroscura sonoridad que encontraríamos años después en algunos fragmentos de Third, y en "Resolve" no podemos evitar acordarnos de Nick Drake y su sencillez siempre bien entendida. Precisamente, y casi premeditadamente, "Drake" es el título de la siguiente canción del álbum, un medio tiempo con reminiscencias folk que contiene una de las melodías más destacadas. "Funny Time Of Year" está construida sobre un crescendo interminable, deparando sorpresas a cada segundo y actuando como última canción del disco. No obstante, la responsable de poner fin a Out Of Season es "Rustin Man", una pieza de carácter experimental que pone un contrapunto prescindible a la completa homogeneidad clásica del álbum.
Una vez leí en una entrevista que Adrien Utley afirmaba que nunca había escuchado a su compañera Gibbons cantar así con Portishead. Probablemente tenía razón.
Puedes escuchar Out Of Season de Beth Gibbons & Rustin Man en Spotify.
Ayer muchos jóvenes dejaron de ser adolescentes de golpe y porrazo. Y no se me ocurre ninguna otra forma de rendirles homenaje que con "Des armes", una canción del sobresaliente grupo francés Noir Désir, que pone música y voz a un emocionante poema de Léo Ferré.
Habla sobre la fuerza de las palabras, a las que compara con armas de fuego. Porque todos hemos creído alguna vez que dialogando, hablando, expresándonos y sí, quejándonos, quejándonos mucho, podíamos llegar a cambiar las cosas. Y, aunque la realidad a veces aparece demasiado de repente, nunca deberíamos olvidar que siempre tenemos que defender lo que creemos que es justo.
Des armes, des chouettes, des brillantes, Des qu'il faut nettoyer souvent pour le plaisir Et qu'il faut caresser comme pour le plaisir L'autre, celui qui fait rêver les communiantes
Des armes bleues comme la terre, Des qu'il faut se garder au chaud au fond de l'âme, Dans les yeux, dans le coeur, dans les bras d'une femme, Qu'on garde au fond de soi comme on garde un mystère
Des armes au secret des jours, Sous l'herbe, dans le ciel, et puis dans l'écriture, Des qui vous font rêver très tard dans les lectures, Et qui mettent la poésie dans les discours.
Des armes, des armes, des armes, Et des poètes de service à la gâchette Pour mettre le feu aux dernières cigarettes Au bout d'un vers français brillant comme une larme.
Aquí tienes una detallada explicación del poema (en francés). Hoy muchos políticos, muchos policías y muchos periodistas deberían leerlo y escuchar esta canción. Si al hacerlo no se les remueven las tripas, ya no sé qué podrá hacerlo.
Autores: S. Balthazar, L. Beckenham, J. Finch, C. Lucas, A. Memon, M. West
Intérpretes: Fanfarlo Disco: Reservoir (2009)
Letra:
They swallowed it whole, they went for the gold, for the gold We fall for the same lies we all have the same shoes to fit
The preachers and books of your empire will fight here alone Some day the will be forgotten and die one by one
The walls the walls are coming down The here and now is coming round It will some day let you down The ships the ships are coming in The great ideas are wearing thin There is nothing left to do
For atoms have gone as far as atoms will go Your books write themselves They line up in row after row
The walls the walls are coming down The here and now is coming round It will some day let you down The ships the ships are coming in The great ideas are wearing thin There is nothing left to do
The Grandfather Paradox (traducido como La paradoja del abuelo), según la Wikipedia, es una paradoja planteada por primera vez por el escritor de ciencia ficción francés René Barjavel en su libro de 1943 Le Voyageur imprudent. Determina lo siguiente: si existiera un viajero que realizara un viaje al pasado y asesinara a su abuelo antes de que éste conociera a su abuela, el viajero no podría existir. Un planteamiento que sirve perfectamente como título y leitmotiv de uno de los discos electrónicos más relevantes de los últimos años, firmado por los alemanes Henrik Schwarz, Âme (alter ego de Frank Wiedemann y Kristian Beyer) y Dixon.
Estos tres artistas decidieron, en una clara muestra de ambición sin precedentes, recopilar la mejor música minimal de todos los tiempos para darle una nueva cara. El resultado enamorará seguro a los seguidores del género, mientras que también sirve de sobresaliente introducción para los que no somos expertos (ni de lejos) en esto de la "música minimal". Es de agradecer que el álbum se acompañe con las grabaciones originales de los artistas remezclados, constituyendo una especie de Greatest Hits histórico. Allí encontramos los nombres de importantes músicos vanguardistas como Steve Reich, Pat Metheny, Patrick Moraz o Arthur Russell, que nos ayudan a aproximarnos a uno de los géneros más incomprendidos e incomprensibles de la actualidad.
No obstante, lo que hace de The Grandfather Paradox un álbum indispensable es su mix imposible de más de 50 años de experimentación. Schwarz, Âme y Dixon realizan un trabajo excepcional, en el que cada pieza se une con la anterior en una armonía tan sorprendente como realmente fascinante e inspiradora. La mezcla es homogénea pero llena de matices, y consiguen que sea absurdo destacar una canción (por así decirlo) por encima de las otras.
Y es que la del abuelo no es la única paradoja del disco. De hecho, está lleno de ellas: es emocionalmente frío, es tranquilamente rítmico, es sencillamente complejo, es sutilmente impresionante.
Al contrario de lo que pueda parecer, The Grandfather Paradox es completamente accesible a cualquier oído interesado en descubrir nuevas formas de expresión musical. Es más: me atrevería a afirmar que es el disco más adecuado para empezar a conocer un género que seguro nos deparará muchas y gratas sorpresas en el pasado y en el futuro.
Puedes escuchar The Grandfather Paradox de Henrik Schwarz, Âme y Dixon en Spotify.
52 canciones para que los 52 lunes del año sean un poco menos lunes. Escúchalas aquí.
C'MONday #01. Eli "Paperboy" Reed: "Explosion" C'MONday #02. Gorillaz: "Feel Good Inc." C'MONday #03. The Doors: "Break On Through" C'MONday #04. Pulp: "Lipgloss" C'MONday #05. Zap Mama: "Vivre" C'MONday #06. The Strokes: "Under Cover Of Darkness" C'MONday #07. Belle and Sebastian: "Another Sunny Day" C'MONday #08. Jónsi: "Go Do" C'MONday #09. Ben L'Oncle Soul: "Seven Nation Army" C'MONday #10. Elvis Presley: "I Got A Woman" C'MONday #11. Architecture In Helsinki: "Wishbone" C'MONday #12. Faith No More: "From Out Of Nowhere" C'MONday #13. Jamiroquai: "Too Young To Die" C'MONday #14. Amy Winehouse: "You Know I'm No Good" C'MONday #15. Violent Femmes: "Out The Window" C'MONday #16. Janis Joplin: "Piece Of My Heart" C'MONday #17. Best Coast: "When I'm With You" C'MONday #18. Primal Scream: "Jailbird" C'MONday #19. The Meters: "Ride Your Pony" C'MONday #20. The Smashing Pumpkins: "Today" C'MONday #21. Vampire Weekend: "Cousins" C'MONday #22. Janelle Monae (feat. Big Boi): "Tightrope" C'MONday #23. Mos Def: "Hip Hop" C'MONday #24. Jefferson Airplane: "Volunteers" C'MONday #25. Yo La Tengo: "My Little Corner of the World" C'MONday #26. The Black Keys: "Gold On The Ceiling" C'MONday #27. Le Tigre: "Deceptacon" C'MONday #28. The Velvet Underground & Nico: "Run Run Run" C'MONday #29. Maxïmo Park: "Apply Some Pressure" C'MONday #30. Patrick Wolf: "The Magic Position" C'MONday #31. The Cure: "Boys Don't Cry" C'MONday #32. Creedence Clearwater Revival: "Susie Q" C'MONday #33. Phoenix: "Lisztomania" C'MONday #34. Pixies: "Here Comes Your Man" C'MONday #35. Andrew Bird: "Fake Palindromes" C'MONday #36. The Clash: "Revolution Rock" C'MONday #37. Antònia Font: "Alegria" C'MONday #38. The White Stripes: "The Hardes Button To Button" C'MONday #39. Blur: "Parklife" C'MONday #40. Two Door Cinema Club: "Something Good Can Work" C'MONday #41. Asian Dub Foundation: "Naxalite" C'MONday #42. Wilco: "Heavy Metal Drummer" C'MONday #43. The Bamboos: "On The Sly" C'MONday #44. Arcade Fire: "No Cars Go" C'MONday #45. Sharon Jones & The Dap-Kings: "Without a Heart" C'MONday #46. Spiritualized: "Electricity" C'MONday #47. Sigur Rós: "Inní Mér Syngur Vitleysingur" C'MONday #48. David Bowie: "John, I'm Only Dancing" C'MONday #49. The Decemberists: "The Sporting Life" C'MONday #50. Trombone Shorty (feat. Jeff Beck): Do To Me C'MONday #51. The Beatles: "A Hard Day's Night" C'MONday #52. Animal Collective: "Brother Spot"
Antes de empezar este No Indie quiero dejar claro, por si había alguna sospecha, que no tengo nada que ver con el “No Indie” que se ha marcado el Festival Internacional de Benicássim (FIB) con la contratación de David Guetta para este verano. De todas formas, aplaudo la iniciativa de introducir nombres alejados de la escena independiente, como ya hicieron el año pasado con Julieta Venegas, o en 2007 con el cantante que ocupa este post, el gran (enorme, gigante) Kiko Veneno. Y la aplaudo siempre y cuando la calidad del artista se acerque más a la del músico de Figueres que a la del DJ francés (o a la de Noel Gallagher). Continúa leyendo la reseña de Échate un cantecitode Kiko Veneno en Dímelorápido
On bended knee is no way to be free lifting up an empty cup I ask silently that all my destinations will accept the one that's me so I can breathe
Circles they grow and they swallow people whole half their lives they say goodnight to wives they'll never know got a mind full of questions and a teacher in my soul so it goes
Don't come closer or I'll have to go Holding me like gravity are places that pull If ever there was someone to keep me at home It would be you
Everyone I come across in cages they bought they think of me and my wandering but I'm never what they thought got my indignation but I'm pure in all my thoughts I'm alive
Wind in my hair, I feel part of everywhere underneath my being is a road that disappeared late at night I hear the trees they're singing with the dead overhead
Leave it to me as I find a way to be consider me a satellite for ever orbiting I knew all the rules but the rules did not know me guaranteed
Adore (1998) es un ejemplo paradigmático de álbum que marca un antes y un después en la carrera de una banda. Con él, The Smashing Pumpkins renunciaron casi por completo a los contundentes guitarrazos de los temas que les llevaron a convertirse en un grupo indispensable de los 90. Un cambio que fue más o menos bien recibido por la crítica (8,1/10 en Pitchfork, 3,5/5 en Allmusic y en Rolling Stone, 4/5 en Mondosonoro), pero que el público pareció no aceptar positivamente: se considera el primer fracaso comercial de la banda, que continuaría en declive hasta su disolución -no definitiva- en el año 2000. Así pues, más que hablar de "contracrítica", hoy toca hablar de "contrapúblico".
Es ver la portada y el precioso artwork de Adore y entender que poco o nada tienen que ver estos Smashing Pumpkins con los de Siamese Dream (1992) o Mellon Collie and the Infinite Sadness (1995). Blancos y negros, estética gótica, oscuridad. Rasgos que se trasladan al álbum y a todas y a cada una de sus canciones. Lejos quedan las potentes "Siva", "Cherub Rock" o "Bullet with Butterfly Wings": es el momento de la introspección, de los ritmos retorcidos, de la sutileza electrónica, de las letras nostálgicas.
Billy Corgan y los suyos no se andan por las ramas y en el primer tema de Adore, la bonita y acústica "To Sheila", ya nos introducen su total cambio de actitud. Sin dar ninguna tregua, aparece "Adore", una canción envenenada, una declaración de amor que ninguna chica en su sano juicio le gustaría escuchar. "Perfect", en cambio, es la otra cara de la moneda. Optimista y brillante, cuenta la historia de una separación con muchas cosas todavía por decir.
Ambientadas siempre en melodías profundas y sintetizadores oscuros, las canciones de Adore se van sucediendo una tras otra como pequeñas gotas de un llanto que parece no tener fin, y a uno le da la sensación que cada una es más amarga que la anterior. "Daphne Descends" estremece por su sinceridad, mientras que "Once Upon A Time" es tal vez la canción más hermosa que jamás ha escrito Corgan en cualquiera de sus múltiples proyectos.
"Tear", "Crestfallen", "Shame" y "Appels + Oranjes" ayudan a reforzar la imagen poética, evocadora y un tanto siniestra de estos inspiradísimos Smashing Pumpkins. En "Pug" vuelve la fuerza, la rabia (siempre contenida) y la potencia de "Adore", y en "The Tale Of Dusty and Pistol Pete" encontramos directamente la mejor letra de Corgan.
Por contra, es inexplicable la inclusión de una canción como "Annie-Dog" en todo este entorno. La única mancha en un disco que significaría, inmerecidamente, el inicio del fin de los Smashing Pumpkins. Quizás ya lo intuían y lo que escuchamos en Adore es tan solo una despedida demasiado anticipada.