sábado, 8 de junio de 2013

Primavera Sound 2013. Sábado 25-05-2013

El último día del festival tenía, por lo menos para servidor, el mejor cartel de la edición. Y no me decepcionó en absoluto. De hecho, haciendo recuento, 3 de los mejores conciertos de este Primavera Sound los vi el sábado: Nick Cave and The Bad Seeds, Apparat y My Bloody Valentine. Un broche de oro perfecto para empezar a salivar pensando en el año que viene (por cierto, a los interesados: ya han salido a la venta los abonos y la distribución según momento-de-compra-precio). 


Apparat: aquí paz y después guerra

Antes que nada, toca volver a dar las gracias a los programadores del Primavera Sound 2013. Esta vez por arriesgarse a traer la versión más compleja de Apparat (nombre bajo el que se esconde el prestigioso músico electrónico Sascha Ring), que venía a presentar su nuevo álbum Krieg und Frieden (2013), descrito por él mismo como "el primer disco que no me ha dolido. Está lleno de imperfecciones porque ha sido realizado por humanos [...] Es un disco extraño, con poco ritmo y mucho drone". Se trata de la banda sonora para una representación del clásico de Tolstói Guerra y paz, que le ha servido como fuente de inspiración para composiciones de marcado carácter ambiental. En concierto el disco funcionó perfectamente, el sonido en el Auditorio Rockdelux fue inmejorable, el público fue -por una vez- respetuoso y Sascha se salió tanto en el apartado electrónico como en el vocal, con sus momentos álgidos en "Lighton" y "A Violent Sky", una de las canciones del año. La escasa iluminación del escenario daba protagonismo casi absoluto a unos visuales manuales, realizados in situ. Una lástima: nos hubiera gustado poder ver más claramente a los músicos para intentar desentrañar los secretos de un sonido emocionante, melancólico, tétrico a veces y siempre embriagador.


Dead Can Dance: pop exótico

Con Dead Can Dance me pasa como con The Jesus And Mary Chain: son uno de los must de la escena indie, pero nunca me he puesto en serio con ellos. Nos cogimos unos frankfurts adictivos (otra vez, por eso son adictivos) y los escuchamos de fondo, cogiendo fuerzas para el resto de la noche. La banda sonaba muy bien y tenían una personalidad muy interesante, con repuntes exóticos que sorprendían y cansaban a la vez, pero no creo que sean para mí.


Thee Oh Sees: el presente y el futuro del grunge

Quienes creen que el grunge está muerto es que todavía no han escuchado a estos locos. En sus discos mezclan el rock and roll más garajero con la psicodelia más alucinante, pero por lo que vimos en el escenario ATP, en directo van directos al grano. Estuvimos bastante alejados del escenario, a la espera de hacer sitio para ir a ver a Nick Cave, pero estoy más que convencido que para los espectadores de las primeras filas el concierto de Thee Oh Sees fue uno de los más salvajes del festival. Por lo menos, ellos pusieron todo de su parte para que así fuera.
Por favor, volved el año que viene y que vuestra actuación no coincida con nada ni nadie más. Muchas gracias. Firmado: Jordi.


Nick Cave and The Bad Seeds: uff, brr, buah, mmm 

Sí, lo de arriba parecen onomatopeyas orgásmicas. Y lo son. Porque a Nick Cave lo odias o lo amas. Pero si lo amas, lo haces muy de verdad. Así que mejor voy por partes:
1) El concierto del australiano diabólico venía precedido por el lanzamiento de su disco más reciente, Push The Sky Away (2013). Un álbum magnífico, que crece a cada escucha, pero que mantiene una calma tensa que no sabíamos si sería la más adecuada para un directo de estas características.
2) Nuestras dudas se desvanecieron desde el primer momento. Cave salió dispuesto a darlo todo, respaldado por unos Bad Seeds liderados por el descomunal Warren Ellis, sin medias tintas de ningún tipo. Al final, las canciones de Push The Sky Away acabaron por sonar mejor en concierto que en el álbum.
3) Nick Cave se gusta tanto o más que él a nosotros. En otro tipo de artista eso sería una muestra de desfachatez inaguantable, pero en él es una irresistible señal de identidad. Encima de un escenario, esa actitud le va como anillo al dedo. Y debajo del escenario también: bajó a darse un baño de masas con el público y acabó por dedicarle el "Suck My Dick" de "Stagger Lee" a una chica que le respondió "I will".
4) Cave tiene un repertorio tan extenso que es imposible contentar a todo el mundo con el setlist. Pareciendo consciente de eso, se dedicó a repasar los temas que mejor representaban su vertiente más oscuramente seductora.
5) Con todo, puedo afirmar sin atisbo de duda que fue el mejor concierto del festival. 
6) Completamente inaceptable que su concierto durara 60 minutos de reloj. A eso se le llama una actuación precoz, señores del Primavera Sound.


My Bloody Valentine. Regreso al futuro IV

Todavía recuerdo estar en mi habitación (y en el autobús, y por la calle, y...) escuchando a todo trapo el Loveless (1991) de My Bloody Valentine, una obra de culto que ha sido mil veces imitada pero nunca igualada. Por aquel entonces me limitaba a dejarme llevar por ese sonido rarísimo de guitarras, esos poderosos riffs y esas voces etéreas de las que apenas entendía un par de palabras. Con el paso de los años, abandoné la obsesión por My Bloody Valentine. Hasta que llegó a mi ordenador su nueva obra, M B V (2013), que parodójicamente hizo que valorara todavía más Loveless.
Algo similar me sucedió al verles en directo. Crearon un auténtico muro de sonido formado por su característico shoegazing, por el que no dejaron pasar casi ni las partes vocales. Pero apenas importó. Volví a dejarme llevar por la fuerza de "I Only Said", "When You Sleep" y "Only Shallow", flipé con su poderosa puesta en escena (al final parecía que el escenario Heineken iba a derrumbarse) y, en resumen, disfruté como un enano. Y sin necesidad de subirme al Delorean.

viernes, 7 de junio de 2013

Primavera Sound 2013. Viernes 24-05-2013

Solange, una de las sorpresas más inesperadas del festival. Foto: Ester Solana
Viernes empezaba con una agradable sorpresa: ¡quedaban tickets disponibles para ver a Daniel Johnston en el Auditorio Rockdelux! Y esa no sería la única sorpresa del día: nos quedaba descubrir a Solange Knowles, ver que Blur todavía tienen la energía de antaño y comprobar que, efectivamente, el cambio climático existe. Si no, ¿a qué viene ese frío en mayo? ¡Chúpate esa, primo de Rajoy


Kurt Vile & The Violators: contra viento y marea

Foto: Ester Solana

Ataviado con un curioso vestido blanco y azul, guitarra en mano, Kurt Vile dejó claro desde el primer momento que él iba completamente a su bola. Y se lo agradecemos, porque el ex-The War On Drugs gana muchos enteros en solitario. Venía a presentar su último disco, Wakin on a Pretty Daze (2013), que no me canso de recomendar a todo el mundo, y aunque el viento no paraba de moverle la melena las condiciones climatológicas no eran las más adecuadas, su sonido fue francamente bueno. Tanto en la parte vocal como en la instrumental, Vile estuvo a la altura de unas composiciones complejas, que a mí me gusta definir como "un Bob Dylan más psicodélico". Nos hubiéramos quedado hasta el final del concierto, pero la solapación con Daniel Johnston nos lo impidió. Así que, Kurt, esperamos verte pronto en sala, resguardados (tú y nosotros) del viento, para poder disfrutar todavía más de temazos como "KV Crimes", "Was All Talk" o "Jesus Fever".


Daniel Johnston. El ídolo de todos

Después de una cola que parecía interminable y que confirmaba el interés del público por ver a Daniel Johnston, al fin accedimos al Auditorio Rockdelux con el concierto recién empezado. Una vez sentados en el enorme teatro, tanto el setlist como las sensaciones que vivimos fueron muy similares a lo que experimentamos en el concierto que el cantautor dio en la Sala Bikini hace poco más de un año. El hecho de que el Auditorio triplicara el aforo de la sala barcelonesa le restó un poco de magia al concierto, pero le sumó emoción. Y es que ver a miles de personas completamente entregadas a Daniel Johnston fue una especie de acto de justicia. Coreamos "The Beatles" una vez más, le acompañamos en su interpretación a capella de "Devil Town" y, como no podía ser de otra manera, se nos pusieron los pelos como escarpias cuando entonó el bis "True Love Will Find You in the End". Público en pie, despedida y el deseo de poder verle y escucharle muchas veces más.


Solange: dejemos de llamarle "la hermana de Beyoncé"

Foto: Ester Solana

Hasta ahora he sido bastante crítico con la organización del Primavera Sound, pero llegados a este punto tengo que quitarme el sombrero por su firme apuesta por la calidad, sea del género que sea y venga de donde venga. Una seña de identidad que hizo que pudiéramos disfrutar de Solange Knowles, que comparte pocas cosas con su hermana Beyoncé y que demostró tener una personalidad suficientemente marcada para que todos empecemos a quitarle el sambenito de "hermanísima". La verdad es que fui al concierto sin haber escuchado nada de Solange. Entre el numeroso público vimos a poca gente de nuestro país, lo que me hace suponer que se trata de un fenómeno real fuera de nuestras fronteras y que pronto lo petará por aquí. Y no sé si sucederá o no, o incluso si ya ha sucedido y no me he enterado (que es lo más probable), pero se merecería tener un éxito similar al de su hermana. Su propuesta va más enfocada a la música negra, con toques electrónicos y un gusto exquisito por un R&B cercano al de Erykah Badu. Cantó de maravilla, se marcó unos bailoteos bastante locos y hasta pidió a la gente que apagara el fucking mobile y se pusiera a bailar. Como sorpresa final, interpretó una versión alucinante de "Stillness is the Move" de Dirty Projectors (puedes escucharla aquí). Un guiño indie que acabó de conquistar a todos aquellos que, como yo, estábamos allí para "ver qué tal la hermana".


The Jesus and Mary Chain: de fondo

Una gran cruz presidía el escenario de Jesus and Mary Chain, banda a la que nunca he prestado demasiada atención pero que tenía ganas de ver para comprobar por qué se la considera una de las leyendas vivas del rock de los 80-90. Si soy sincero, tengo que reconocer que me limité a escucharlos de fondo; además, los integrantes de la banda no parecían muy motivados y tocaban casi de manera automática. Así que la experiencia fue como cuando pongo un recopilatorio en la minicadena mientras estoy con los amigos. Continúo sin haberles dedicado la atención que -probablemente- merecen.


Blur: el sueño húmedo de Joan Clos

Supongo que todos os acordaréis. Corría el año 2004 y Barcelona celebraba el Fòrum Universal de les Cultures, un polémico evento que nos dejó como herencia, además del espacio donde ahora se celebra el Primavera Sound, unas fotos impagables de Joan Clos, el alcalde de la ciudad condal por aquel entonces. Un fiestero en toda regla que todavía no me explico cómo logró escapar del Tribunal de La Haya por poner de moda la batukada. Pues bien, si Clos vio "su" Fòrum durante el concierto de Blur, supongo que se puso muy contento. Muchísima gente, guiris a tutiplén, vasos de cerveza volando... La Barcelona soñada, vaya.
En lo musical, Blur nos sorprendieron para bien. Uno siempre tiene la sospecha de que estas giras de reunión no son más que un "vamos a ganar dinero a costa de nuestros fans". Y no digo que ésta no lo fuera, pero ojalá todas fueran así. Daba la sensación de que sabían que contaban con la aprobación del público hicieran lo que hicieran, y lo que hicieron fue, como diría aquél, "salir a disfrutar". Empezaron muy fuerte, con un "Girls & Boys" que nos volvió locos y que nos recordó por qué Blur es una de las bandas indispensables de la historia del rock: estribillos pegadizos, personalidad inconfundible y una facilidad innata para crear himnos de distintos estilos. Hubo altibajos, sí, tuvieron algún fallo, también, sonaron mucho mejor cuando fueron más cañeros, de acuerdo, pero con una colección de canciones como "Coffee & TV", "Parklife" o "Song 2" era imposible no pasárselo bomba. Además, me dieron la última sorpresa del día: tocaron "Out Of Time".

jueves, 6 de junio de 2013

Primavera Sound 2013. Jueves 23-05-2013

Dinosaur Jr. fueron los triunfadores de la noche. Foto: Ester Solana



Nuestra primera jornada del Primavera Sound 2013 prometía grandes emociones. En especial, nos podían las ganas de ver a Dinosaur Jr., Deerhunter (conocidos también como "el grupo comodín" o "The Comodin Band" después del festival, ya que fueron los encargados de sustituir a Band Of Horses en el último momento), Grizzly Bear y Phoenix. El resultado fue un tanto desigual. 


Tame Impala: Timo Impala

Ya, ya, lo sé, os pido disculpas por el lamentable juego de palabras. Pero no se me ocurre ninguna forma mejor de resumir lo que vimos durante unos 30 minutos en el escenario Heineken. Personalmente tuve mi enganche al debut de Tame Impala hace un par de años, pero me cansé bastante rápido de su propuesta. Tanto, que recibí el nuevo y aclamado disco con bastante indiferencia. De todos modos, nos acercamos a verlos en directo y... Bueno, la primera canción nos gustó, Kevin Parker demostraba muchas tablas a la voz y a la guitarra. Pero a partir del segundo tema todo se vino abajo: las canciones estaban compuestas bajo el mismo patrón, utilizaban los mismos recursos melódicos y rítmicos una y otra y otra vez, guardaban golpes de efecto efectistas bajo la manga y prepararon unos visuales dignos de Windows Media Player (vintage y hipster, ¡100% approved!). Total, que me sacaron del concierto. Tal vez dentro de unos años me arrepienta de haber escrito esto, pero en resumidas cuentas me parecieron un bluf con pretensiones. Todavía no entiendo qué es lo que les ha llevado a ser encumbrados por tantísima gente.


Dinosaur Jr., o la masterclass "Cómo dar un concierto"

Foto: Ester Solana

Después de la psicodelia de tres al cuarto (uy, cuando me arrepienta me voy a arrepentir muy fuerte) de Tame Impala, J Mascis y los suyos nos demostraron, como Afghan Whigs el año pasado, que no están, ni mucho menos, extinguidos. Lección absolutamente brutal de un trío en plena forma, desempolvando su greatest hits particular y presentando las nuevas composiciones del excelente I Bet On Sky (2012). El inicio del concierto estuvo marcado por algún problema técnico con la voz, pero poco importó. Los allí presentes, muchos de ellos fanses de los que llevan camisetas del grupo, estábamos conquistados desde el segundo 1. Un concierto que fue en constante crescendo y que terminó con algunos pogos protagonizados por gente que empezaba a sufrir los efectos del alcohol. Al final, un tío con cara de pocos amigos (se ve que era el cantante de Fucked Up, de los que no he escuchado nada porque su nombre ya lo dice todo) salió al escenario para interpretar con ellos uno de sus temas más hardcores. Como uno de los momentazos de todo el festival guardaremos la versión que Dinosaur Jr. nos regalaron del "Just Like Heaven" de The Cure. Lo dicho: ENORMES.


Deerhunter: ligera decepción

Foto: Ester Solana

Si fuera honesto, o un crítico musical de los de verdad (de esos que ponen notas como "6,93" o "4,34"), no debería escribir esta reseña. Por dos motivos: 1) porque después de vivir un concierto de Dinosaur Jr. lo siguiente que ves y escuchas está muy condicionado, y 2) porque a los Deerhunter los vimos desde la grada del escenario Ray-Ban, el anfiteatro. Y creo sinceramente que una propuesta como la suya se aprecia muchísimo más desde las distancias cortas. Pero como no soy honesto ni crítico musical de los de verdad, y además este es mi blog y hago con él lo que me da la gana, diré que me esperaba más de una de las bandas que más escucho actualmente. Les faltó un poco de fuerza, ese ímpetu que me hiciera levantar del banco-escalera y dirigirme rápidamente a primeras filas. En su defensa tengo que admitir que su misión no era fácil: me estaba comiendo un frankfurt demasiado adictivo.


Grizzly Bear: elegancia a medianoche

Foto: Ester Solana

Una de las decisiones más incomprensibles del Primavera Sound 2013 fue programar a Grizzly Bear pasada la medianoche. Un grupo que ha firmado discos de la calidad -pero también tranquilidad- del reciente Shields (2012) o del exitoso Veckamitest (2009) podía adormecer a más de uno. Nosotros ya íbamos mentalizados, así que nos dedicamos, simple y llanamente, a dejarnos abstraer por las voces (¡qué voces!), melodías (¡qué melodías!) y paisajes instrumentales llenos de hermosas armonías (¡qué paisajes instrumentales llenos de hermosas armonías!) de la banda. Tuvieron el detalle de traer una escenografía muy austera pero elegante, que casaba a la perfección con canciones como la más-que-escuchada "Yet Again" o la todavía-más-escuchada "Two Weeks", que ya son clásicos del pop del siglo XXI. Cerraron con el tema que pone punto y final a Shields, "Sun In Your Eyes", que fue, sin lugar a dudas, una de las interpretaciones más espectacularmente bonitas que recuerdo. Solo por eso ya valió la pena permanecer despierto todo el concierto.


Phoenix: ellos saben cómo hacerte bailar

Vale, el nuevo disco de Phoenix ha sido una de las decepciones de este año. OK, su cantante, Thomas Mars está casado con Sofia Coppola. De acuerdo, los franceses son una banda facilona, sin mucha más pretensión que hacer canciones para que los indies también tengamos nuestro subidón en las discotecas. Pero qué más da. Phoenix nos demostraron que son unas bestias del escenario, que controlan como pocos los tempos de los conciertos y que tienen hitazos para todos los públicos. Es imposible dejarse llevar por la euforia del nuevo single "Entertainment" o de las canciones generacionales como "Lisztomania". Pero también sabes que no tienen mucho más que ofrecer, así que, cuando escuchamos lo que queríamos escuchar, y en vistas que quedaban dos días más de festival y ya estábamos bastante cansados, decidimos que ya teníamos suficiente. Sí, nos perdimos el momento en que J Mascis subió a tocar un tema con ellos, aunque esa noche ya habíamos visto de lo que es capaz el líder de Dinosaur Jr.

miércoles, 5 de junio de 2013

Primavera Sound 2013


Casi un año después de mi última entrada en el Whisky, vuelvo para escribir unas notas sobre el Invierno Primavera Sound 2013. Un excelente festival que ha batido, por lo menos, tres récords: el de asistencia, el de frío y el de precio por cerveza. Durante los días que asistimos al Parc del Fórum pudimos ver enormes conciertos rodeados de hipsters, indies, ingleses/as, promotores de agua de color sospechoso y señoras-que-salieron-a-pasear-y-acabaron-dándolo-todo-en-el-escenario-Heineken.

El Primavera de este año venía precedido de algunas noticias negativas, en especial las "caídas" de cartel de artistas como Fiona Apple o Rodríguez. Quizás ese era un mal presagio de lo que vendría después, ya que Band of Horses también cancelaron (justo un día antes de su actuación programada) y la organización tuvo graves problemas de comunicación. Y es que si algo hemos aprendido este año, aparte de que mayo es el nuevo noviembre, es que si querías enterarte de todas las actualizaciones del festival tenías que estar permanentemente conectado a la web del Primavera Sound o a su Twitter o a lo que fuera. Se ve que las múltiples pantallas del recinto no valían para anunciar que, si estabas interesado en asistir al concierto de compensación que dará Rodriguez el 8 de julio en el Poble Espanyol, tenías que ir a las taquillas del Primavera el sábado (y sólo el sábado) para comprar tu entrada. Ni que, si querías ir a la actuación que Daniel Johnston daba en el Auditorio Rockdelux, tenías que reservar un ticket pagando 2 euros. En cambio, para lo que sí que servían las pantallas era para poner una y otra vez anuncios de próximos conciertos y el vídeo de presentación del cartel en el que, irónicamente, continuaban apareciendo Rodríguez, Fiona Apple y Band of Horses.

En la parte positiva están las propuestas musicales que nos ofreció el festival, que son las que realmente cuentan. No todo el mundo tiene el privilegio de poder asistir, en apenas 72 horas, a conciertos de la talla de Blur o Nick Cave and the Bad Seeds y descubrir nuevos artistas con la certeza casi absoluta de que "si están en el cartel del Primavera valdrán la pena". Y ahí sí que el Primavera Sound 2013 cumplió con todas las expectativas.

En los próximos posts escribiré, ordenadas por días, pequeñas crónicas de todos los conciertos que pudimos ver, ya fueran pequeños fragmentos o actuaciones enteras, con el testimonio gráfico de Ester Solana.

¡Bienvenidos de nuevo! ¡Let's (whisky on the) rock!

Jueves 23-05-2013: Tame Impala, Dinosaur Jr., Deerhunter, Grizzly Bear, Phoenix
Viernes 24-05-2013: Kurt Vile & The Violators, Daniel Johnston, Solange, The Jesus and Mary Chain, Blur
Sábado 25-05-2013: Apparat, Dead Can Dance, Thee Oh Sees, Nick Cave and The Bad Seeds, My Bloody Valentine

domingo, 10 de junio de 2012

Canción de la semana: "Mary", de Spiritualized



Canción: Mary
Autor: J. Spaceman (Jason Pierce)
Intérpretes: Spiritualized
Disco: Sweet Heart Sweet Light (2012)

Letra:

Mary, take your big brown eyes and look away
You're searching in vain
Mary take your big red heart and turn around
They'll make you insane

You know you're getting beat in the morning
Spend the night on the tiles
You know you're only searching for glory
But now you've gone and missed it by miles

Mary, take your healing hands and turn around
There's nothing to save
Mary, take you words of love and tear them out
They're starting to fade

You know you're gonna hurt in the morning
Spend the night all alone
You know you're only searching for glory
But now you gotta face it alone

You know you're getting beat in the morning
Spend the night on the tiles
You know you're only searching for glory
But now you've gone and missed it by miles

Mary, you know this life's so sweet
And filled with stuff that ain't yet dead
Mary, you know we both had dreams
But you're the one who got to live them instead 

Recuerda que puedes escuchar todas las canciones de la semana en Spotify