Cuando los administradores de Last.fm decidieron (no sin cierta polémica) hacer pagar tres euros al mes a todos los usuarios que no fueran estadounidenses, ingleses o alemanes, los que no estábamos dispuestos a gastárnoslos tuvimos que buscar alternativas para escuchar música on-line. Y de pronto apareció Spotify.
Para quién no haya probado aún este nuevo sistema gratuito de música en streaming, sólo diré que os lo bajéis, os lo instaléis (al final del post explico cómo hacerlo) y lo empecéis a disfrutar. Os aseguro que no he cobrado nada por escribir este artículo.
En un primer vistazo, Spotify parece un proyecto destinado a durar cuatro días: su enorme catálogo de canciones, sus opciones de reproducción personalizadas y el hecho de que sea gratis son elementos más que suficientes para que los antipiratería, la SGAE y demás pongan el grito en el cielo y vuelvan a decretar el cierre de un medio completamente adaptado a las necesidades del internauta aficionado a la música. Nada más lejos de la realidad.
La gran diferencia se encuentra en que Spotify cuenta con el apoyo de las principales multinacionales; es decir, por una vez, la siempre tan criticada industria discográfica se ha puesto de acuerdo y ha decidido que este nuevo software puede ser la solución definitiva a sus continuos problemas con internet. ¿Por qué? Porque Spotify se entiende como un nuevo medio radiofónico. Un medio costumizado que permite a los anunciantes poner sus cuñas publicitarias (aunque por ahora no estén demasiado explotadas), permite a los usuarios escuchar las canciones que quieran en el momento que quieran y con una calidad de sonido excelente, permite la expansión de artistas noveles y permite conocer nuevas tendencias. Además, tiene un modelo de negocio muy claro y sencillo, con diferentes opciones de pago que posibilitan, por ejemplo, poder escuchar Spotify durante 24 horas sin cortes publicitarios a cambio de un euro.
Y todo esto con tan sólo un año de existencia. Con este panorama, las que deberán ponerse las pilas tarde o temprano serán las emisoras de radiofórmula.
Cómo bajar, instalar y registrarse en Spotify
En principio, Spotify funciona con un sistema privado de invitaciones, pero es relativamente fácil de "burlar":
1) Descarga gratuitamente el software desde Softonic
2) Ves a la siguiente página de registro y rellena sus campos: https://www.spotify.com/en/get-started/
3) Instala el software en tu ordenador. Ejecútalo e inserta tu nombre de usuario y contraseña para acceder.